¡Te encontré!

Desde hace unos días me venía preguntando si realmente existe la total felicidad y dónde encontrarla. Me considero una persona bastante afortunada. Como todos los días, tengo ropa con que vestirme, cama en la que dormir, una familia y sobre todo gente que me quiere y a la que quiero muchísimo. Sin embargo siempre me daba la sensación de que me faltaba algo para alcanzar la total felicidad.


Cuenta la leyenda que al principio de los tiempos unos demonios se reunieron para quitarle y esconderle al ser humano su bien más preciado, la felicidad.

El primero propuso: “Vamos a esconderla en la cima del monte mas alto del mundo”, a lo que inmediatamente repuso otro: “no, recuerda que tienen fuerza, alguna vez alguien puede subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde esta”.

Luego propuso otro: “Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar” y otro contesto: “No, recuerda que tienen curiosidad, alguna vez alguien construirá algún aparato para poder bajar y entonces la encontrara”.

Uno mas dijo: “Escondámosla en un planeta lejano a la Tierra”. Y le dijeron: “No, recuerda que tienen inteligencia, y un día alguien va a construir una nave en la que pueda viajar a otros planetas y la va a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad”.

El último de ellos, era un demonio que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas de los demás. Analizó cada una de ellas y entonces dijo: “Creo saber donde ponerla para que realmente nunca la encuentren”.

Todos se volvieron hacia él asombrados y preguntaron al mismo tiempo: “¿Donde?”. El demonio respondió: “La esconderemos: dentro de ellos mismos, estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán”.

Todos estuvieron de acuerdo y desde entonces ha sido así: el hombre se pasa la vida buscando la felicidad, sin saber que está dentro de él mismo.


Por eso ya no busco la felicidad como ese borracho que busca su casa. Ahora simplemente cuento todas las cosas que tengo y las tantas otras que me quedan por tener. Porque aunque sea consciente de que la perfección no existe, prefiero vivir en mi burbuja pensando que mañana me tocará a mí. Y porque así, con lágrimas en los ojos y una sonrisa de oreja a oreja, duermo cada noche, sintiéndome cien por cien iluso y, como consecuencia, cien por cien feliz…


7 comentarios:

CUASI-MODITA dijo...

buaFF.. si ya lo sabes emeá.. pa ke decirte naa.. me encanta. ojala no cambiemos nunka y siempre seamos felices pase lo k pase..(K)

estrellita dijo...

a mi tmb m a gustao mchoo!
pero sin ponerse sentimentales Pa..juus.. :)

Erudito dijo...

Me encandilan estos textos tan reflexivos y que te hacen pensar tanto... La felicidad es lo mejor que hay =)

Criis..*! dijo...

primoo me encanta como escribees de verdad! pff..=)

Virginia!!* dijo...

Ostia Emea menkanta!

Vecino dijo...

vaya gay, sin duda eres gay!! jajaja algun dia leere un articulo tuyo en un periodico hijo!!

Emeá dijo...

Cuasi-Moda: la felicidad solo depende de nosotros ya lo sabes...

Estrellita: todo es consecuencia de una terrible resaca

Miguelage: Somos los Jefes!! =D

Criss: Te ordeno que comentes más a menudo...

Virginia: =D

Vecino: Me alegro de que por fin te hayas dignado a comentar en este antro... Ojalá y algún día os manipule a todos desde el "SPORT"